Olga Cano, la maestra que vino de Catamarca a Neuquén y se quedó (foto Matías Subat-patagonia foto press)
Cano, con casi treinta años en la docencia, manifestó que la noticia del homenaje “fue una sorpresa, porque estoy en la última etapa de mi carrera y de acá a fin de año me estoy por jubilar”.
Antes de viajar a San Juan, la docente fue recibida en la capital neuquina por el secretario de Estado de Educación, Cultura y Deporte, Ernesto Seguel. La reunión se realizó este miércoles en el despacho del funcionario.
“Lo que se destacó, sobre todo, es el trabajo que hace todo el equipo de la escuela; también los padres, los alumnos y toda la comunidad que nos apoya”, dijo Cano, y resaltó el rol de la institución: “en la escuela se trabaja para construir los proyectos de carácter pedagógico con la idea que todo lo que se aprende en las diferentes áreas sirva para mejorar la calidad de vida de los alumnos”.
La escuela primaria Nº 320 está inserta en la comunidad mapuche Cayulef, de Costa de Catan Lil, a 15 kilómetros de la ruta nacional Nº 40 y a 75 kilómetros de la localidad de Junín de los Andes.
La docente homenajeada, que pasó gran parte de su carrera en colegios rurales, afirmó que “para mí, toda la carrera fue satisfactoria; será porque soy una maestra de vocación, pero he tenido la suerte de trabajar en lo que me gustó”. Recalcó también que “la zona rural tiene el encanto de los chicos, que les gusta aprender y les gusta ir a la escuela, la inocencia, el apoyo de los padres y todo eso que uno les puede brindar para insertarse en este mundo que cambia día a día”.
“Soy de la provincia de Catamarca y vine a trabajar como maestra de grado a Zapala. Si mal no recuerdo, en ese momento hacían falta maestros de grado, así que el director, cuando vio que tenía el quinto año completo, me puso al frente de un grado”, recordó.
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