Si la velocidad de tu conexión inalámbrica a internet es menor de la que debería, puede que tengas un intruso accediendo a ella. Te explicamos cómo detectarlo y también qué hacer para que no te vuelva a ocurrir.
Muchos usuarios dejan la red wifi de su casa abierta para que la utilice el resto de la familia y eso deja abierta la puerta a los ladrones.
Son las 9 de la noche y como todos los días te dispones a ver un nuevo capítulo de tu serie favorita en la computadora. Pero como cada día, la señal inalámbrica de conexión a internet parece ralentizarse en ese mismo momento.
"No es normal que vaya tan lento", piensas. Y tu sensación de relax empieza a disiparse. Te desesperas. "No se carga", exclamas, mientras pulsas las teclas con insistencia. "¿Por qué no se carga?". Y sin nadie que te responda, te enojas.
Si te encuentras en esa situación con frecuencia, quizás deberías pensar que alguien más se está conectando a tu red wifi sin que lo sepas.
¿Pero cómo saberlo? Y, sobre todo, ¿cómo evitarlo?
Te lo contamos paso a paso.
1. Sospecha
La primera pista ya la tienes: tu internet se vuelve más lenta a ciertas horas del día y lo hace de forma recurrente.
Si tu red wifi está más lenta de lo normal, sospecha.
Muchos usuarios dejan la red wifi de su casa abierta para que la utilice el resto de la familia y eso deja abierta la puerta a los ladrones.
Son las 9 de la noche y como todos los días te dispones a ver un nuevo capítulo de tu serie favorita en la computadora. Pero como cada día, la señal inalámbrica de conexión a internet parece ralentizarse en ese mismo momento.
"No es normal que vaya tan lento", piensas. Y tu sensación de relax empieza a disiparse. Te desesperas. "No se carga", exclamas, mientras pulsas las teclas con insistencia. "¿Por qué no se carga?". Y sin nadie que te responda, te enojas.
Si te encuentras en esa situación con frecuencia, quizás deberías pensar que alguien más se está conectando a tu red wifi sin que lo sepas.
¿Pero cómo saberlo? Y, sobre todo, ¿cómo evitarlo?
Te lo contamos paso a paso.
1. Sospecha
La primera pista ya la tienes: tu internet se vuelve más lenta a ciertas horas del día y lo hace de forma recurrente.
Si tu red wifi está más lenta de lo normal, sospecha.